Cruces, copas y serpientes: la simbología farmacéutica
La historia de la farmacia es verdaderamente interesante, pero hay parte que todavía no conoces. ¿Te has planteado alguna vez de dónde viene la simbología farmacéutica?
Seguro que has visto la típica cruz verde de los letreros de las farmacias españolas, así como la serpiente enrollada en una copa. Vamos a explicar su origen, pero no solo eso: vamos a conocer muchos más símbolos de los que habitualmente vemos en nuestras calles.
¡Arrancamos!
La cruz verde latina
Probablemente este sería el símbolo que reconocerías entre un millón cuando hablamos de farmacias. Su origen sanitario es relativamente reciente.
Nos remontamos a febrero de 1863 cuando en Suiza se crea la “cruz roja”, que usa los colores invertidos de la bandera. Fue entonces cuando mucha gente empezó a relacionar la salud con este símbolo y las boticas lo adoptaron.
¿Y el color verde? Se dice que en Francia no hacía mucha gracia usar el símbolo de la Cruz Roja y decidieron prohibirlo. Finalmente cambiaron los colores por los de la naturaleza, en referencia al origen de los ingredientes de los fármacos.
Por lo tanto, aunque en España usamos el color verde para distinguir las farmacias por la influencia francesa, en otros países se sigue usando el rojo, como ocurre con Alemania.
La Cruz de Malta
Parece que la cosa va de cruces. Ahora es el turno de la de Malta, una variación de la cruz latina y de la griega, que también se usa frecuentemente en las farmacias.
Esta era empleada por la Orden de Caballeros Templarios de la Primera Cruzada en los Hospitales de Jerusalén.
La también llamada cruz de San Juan, probablemente, fue introducida en la Orden por Beato Gerardo, su fundador. Al parecer esta cruz era un símbolo de Amalfi, una archidiócesis italiana de Campania, de donde era Gerardo.
La otra teoría es que está basada en las cruces usadas en la Primera Cruzada, finales del siglo XI. Las conocemos también como cruces patata o templarias.
Fuera como fuese, la Orden de San Juan se fundó para ayudar a las personas. Es decir, tenía un fin benéfico y piadoso, aunque con el tiempo fue creciendo y se convirtió en una de las órdenes templarias más poderosas.
Todos sus miembros vestían con un hábito oscuro y la Cruz de Malta de color blanco. Así mostraban su pureza.
Cómo símbolo de bienestar muchas farmacias la usan hoy día en sus letreros. Eso sí, adaptándola a los colores de la naturaleza, al igual que ocurre con la Cruz latina.
El mortero y el pistilo
El mortero no solo se usa en la cocina, sino que también sirve para pulverizar y mezclar sustancias.
Los farmacéuticos y boticarios lo han empleado para fabricar medicamentos desde tiempo inmemoriales.
Ya en “el papiro de Ebers”, un documento con información sobre hierbas medicinales fechado en 1.500 a.C, nada más y nada menos, se hace referencia a este mortero.
No obstante, no fue hasta el siglo I, cuando se hace referencia directa al mortero y el pistilo como símbolo de los medicamentos. Fue en una obra del poeta romano Décimo Julio y, desde entonces, es un símbolo internacional.
Las letras RX
Estas siglas aparecen principalmente en las farmacias americanas, aunque podemos encontrarlas en cualquier farmacia europea. Tenemos varias teorías al respecto:
Primera teoría: viene del latín
Las letras Rx son las abreviaturas de la palabra latina “recetere”, que significa “tómala tú”.
Hay que tener presente que antiguamente los boticarios redactaban la fórmula, mezclaban y fabricaban los medicamentos. Actualmente, con la llegada de las grandes farmacéuticas, prácticamente solo ha quedado el resquicio de las “fórmulas magistrales”.
Según el manual farmacéutico, la abreviatura latina Rx se suele completar con “fiat mistura” (que se mezcle). Abreviada a su vez como fm o ft. mist.
Teoría número dos: invocar un dios
Esta teoría aparece en el libro “Devils, Drugs, and Doctors : the story of the science of healing from medicine man to Doctor”, Howard W. Haggard, publicado en 1929.
Según esta publicación, Rx no es una abreviatura de una palabra latina que significa receta. Se trata de una invocación al dios Júpiter para que haga que el tratamiento sea eficaz. El símbolo Rx sería una modificación del antiguo símbolo del dios romano.
Teoría número 3: Horus al rescate
Menos mística que la anterior… aunque por el estilo. La R sería “receta”, sin embargo, la X tendría otro significado muy diferente.
El símbolo antiguo de la farmacia era una R y una “x” debajo, dibujando un “Ojo de Horus”.
Según la mitología, Horus era hijo de los dioses egipcios Isis y Osiris. Además, era sobrino de Seth, un ser malvado que asesinó a su hermano Osiris.
En una pelea con su sobrino Seth le sacó el ojo y, en un acto de rabia, lo rompió en mil pedazos. Fue Thoth (el dios de la sabiduría y la magia) quien encontró el ojo destrozado e hizo magia para repararlo. Luego se lo devolvió a su dueño.
Desde entonces, Horus tiene un ojo mágico y con él pudo revivir a su padre, Osiris, que había sido asesinado.
No es de extrañar que, con esta historia en el antiguo Egipto el Ojo de Horus, fuera considerado un potente amuleto para garantizar la salud y evitar los males.
Y, según esta teoría, sería el origen del símbolo farmacéutico “Rx”.
Ah, por cierto, una variación de este ojo (dentro de una pirámide) es un símbolo masón. También se encuentra en un billete de dólar estadounidense y en el Gran Sello del país… por lo que lo mismo hay sociedades secretas en el origen de la farmacia americana.
Copa de Higía
La copa o cuenco de Higía es uno de los símbolos de la farmacia más reconocibles en los países occidentales.
Hygieia era la diosa griega de la higiene y la salud. Su signo es una copa o cáliz con una serpiente enroscada alrededor de su tallo. Ella fue invocada junto con su padre Asclepio y Panacea al original Juramento Hipocrático.
El cuenco de Higía se viene usando dentro de la simbología farmacéutica, al menos, desde 1796, cuando se acuñó en una moneda para la Sociedad Parisina de Farmacia.
Actualmente es muy común en los letreros de las farmacias europeas, aunque no tanto en Estados Unidos, donde se usa más el mortero.
La Vara de Asclepio
La Vara de Asclepio (también llamada Bastón de Esculapio). Es un palo con serpientes entrelazadas manejado por Asclepio, una deidad griega asociada a la curación y a la medicina.
La serpiente y el bastón eran símbolos de culto separados, pero que se combinaron en algún momento.
La serpiente significa renovación (mudar la piel) y medicina, pues ya en época muy antigua se empleaba algunas de sus partes como remedio para el dolor y el tratamiento de enfermedades.
El bastón seguramente estaba asociado a los médicos que iban de ciudad en ciudad curando males. Esta vara evitaba que se cayesen y los ayudaba a cumplir su cometido.
Otra teoría sobre este símbolo farmacéutico
Algunos dicen que realmente no tiene un significado mitológico, sino que es una representación directa de un tratamiento de dracunculis, la enfermedad del gusano de Guinea. En este caso, el gusano ocuparía el lugar de la serpiente, pues se va sacando de la piel humana enrrollándose poco a poco en un palo.
La confusión estadounidense con el Caduceo
El caduceo también presenta serpientes. Se trata del símbolo tradicional de Hermes y contiene dos serpientes enrolladas en un bastón con alas.
Debido a su similitud con la Vara de Asclepio es usado, principalmente en EE.UU., como símbolo de la medicina. No obstante, la realidad es que su origen está vinculado a la alquimia y al comercio.
Por eso se atribuye su uso a errores y malinterpretaciones ocurridas a primera mitad del siglo XX.
Y hasta aquí nuestro post de simbología farmacéutica. Y tú ¿con qué símbolo te quedas? ¿Conoces alguno más?